Origen: África del Sur

El jaspe plateado es otra piedra asombrosa de la gran familia del jaspe. Con sus características químicas comunes a esta roca, contiene un tenor muy fuerte en sílice que puede representar hasta el 95% de la composición del jaspe de hoja de plata.

Esta piedra se distingue sobre todo por la presencia de óxido de hierro, característico de piedras como la hematita y el jaspe hematoide.

Las demás características del jaspe plateado no difieren de las de otros jaspes polimórficos de naturaleza sedimentaria. Los colores del jaspe plateado tienen una gama gama de blanco, marron, negro, morado, gris, naranja o incluso una mezcla de más colores en una piedra.

El jaspe de plata pertenece al sistema de cristal trigonal.  La piedra tiene una línea blanca, su brillo es bastante brillante. La densidad del jaspe plateado es 2,75. En cuanto a su dureza, ronda entre 6,5 y 7 en la escala de Mohs.

El jaspe de hoja de plata es abundante en varios yacimientos alrededor del mundo: en Brasil, Estados Unidos, Alemania, Francia, Rusia y África

A nivel físico, el jaspe plateado es muy recomendable para combatir estados de agotamiento y fatiga.

El cálculo facilitaría la circulación sanguínea para irrigar adecuadamente todos los músculos y órganos de forma óptima, lo que permitiría luchar contra los calambres o “piernas pesadas”. Tonificar la circulación sanguínea de esta manera ayudaría en gran medida a restaurar todas las funciones del cuerpo y aumentar sus funciones vitales.

El jaspe de hoja de plata también tiene la mayoría de las funciones curativas y terapéuticas atribuidas a la piedra de jaspe en general, a saber, beneficios para el sistema digestivo, para la piel, para los riñones y glándulas, para la relajación de los músculos y nervios.

Propiedades:

A nivel psicológico, el jaspe plateado se llama el “protectoreur suprema” porque la piedra actúa como un escudo que brinda la protección necesaria para reconfortar al cuerpo de cualquier forma de agresión o fenómeno psicológico invasivo.

La purificación del jaspe de la hoja de plata se realiza sumergiendo la piedra en agua salada destilada durante unas horas.  La recarga se realiza, como con todas las piedras de jaspe, exponiendo la piedra a los rayos del sol.

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